Tres volúmenes marcan ésta perspectiva, haciendo una lectura acostumbrada, el primero, vestido de bloques ornamentales -solución de época para mitigar la entrada de la luz natural y evitar la ganancia térmica del interior-, contiene los usos meramente administrativos. Al centro se proyecta una techumbre de elegantes apoyos rígidos con un ritmo marcado que cubre unos tantos espacios para estacionamiento vehicular. Al final de nuestra lectura, reposa un masiso paralelepípedo acostado que conecta con los volúmentes anteriores, este último es de aspecto austero cubierto solo con placas de hormigón elegantemente colocadas con una junta alterna. Este último resguarda las actividades de carácter operativo.
Desconocemos el diseñador de esta obra
1952 ?
Ancón, Ciudad de Panamá